Mejor tarde...

Al final, por suerte, sí que ha habido consecuencias.

Me refiero al borrado (unas treinta veces ni más ni menos) y posterior destrucción (con saña, desde luego) de los discos duros de Bárcenas que tenía en poder el PP (y que inezplicablemente el juez no los requirió desde un principio). Dicha acción les ha valido una nueva imputación (ya van dos) al partido de la "sensatez y transparencia".

29 de julio de 2016