Nada le hizo sospechar que le pudiera estar engañando.
Pasaban el noventa por ciento del tiempo juntos, y era un tiempo muy feliz, especial. Así que cuando la Policía del Pensamiento irrumpió en su casa y se llevaron a su pareja esposada, permaneció con la cabeza gacha, sin decir palabra. No hizo falta que le dijeran nada, supo con total certeza que, durante todo ese tiempo, él había estado fantaseando con otra vida.
20 de febrero de 2019
20 de febrero de 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario