Hoy una tormenta me ha mantenido en el coche un buen rato, quizá una hora. La lluvia caía incesante y los truenos hacían temblar los cristales del coche. Lástima que el paisaje que nos rodeaba no fuera victoriano.
4 de julio de 2016
4 de julio de 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario