Cuan absurdo, estúpido y vacuo es el debate que se ha creado a cuenta de que la Ministra de Igualdad haya dicho que le gusta que la piropeen y le abran la puerta, que lo considera un gesto de caballerosidad. Y claro, las extremistas de turnos han tenido que salir a la palestra con que eso es machismo y tal y tal... Está claro que hay piropos y piropos (los típicos de albañil, por ejemplo), pero seguro que hay temas mucho más importantes que debatir para lograr la igualdad real que si un hombre le abre la puerta a una fémina diciéndole "pase usted, señorita".
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