viernes, 1 de octubre de 2010

Correr

El pasado 26 de septiembre corrí por vez primera una carrera popular, fueron 10 kilómetros que tardé en recorrer 58 minutos y 24 segundos. El tiempo no es gran cosa, pero acabé satisfecho por terminarla sin problemas.

Es curioso, pero pensando en ello veo claro que la vida es como una carrera. Se pasa uno todo el tiempo corriendo en dirección a la meta, y cuando se llega a ella no se para, sino que se sigue corriendo en dirección a la siguiente. O sea, que una vez llegas a un sitio, éste te conduce irremediablemente a otro destino.

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